lunes, 27 de octubre de 2008

no me escondo, huyo

Me encontrarás en el grupo de las perdidas, pero si intentaras acercarte desaparecería. Si tuvieras que mirarme desde tus ojos, deberías adquirir una visión más profunda de mis realidades. Si pudieras escuchar el veneno que brota en determinadas palabras que arrojo sin pensar, me tendrías.

Todo lo malo y todo aquello que maravillosamente me tiene sin cuidado, me dibuja. Mas allá de la suciedad de la superficie que apela sin medida lógica a la decadencia...

Si ahí, a lo lejos estoy yo, que huí como generalmente hago una y otra y otra vez.
Hasta cuándo? Desearía que no fuese una pregunta retórica.

1 comentario:

Juliana Rodríguez dijo...

No hay que huir, hay que dar la vuelta completa y seguir. echar raíces como diría el personaje de Leon en el Perfecto asesino.