Esos ojos melancólicos abarrotados en el lujo que te brindó el pasado. Es evidente que los cimientos te han dado asilo pero ahora es tiempo para un recambio. Te empujaron, ahora se vuelve algo obligatorio. Dejo de permanecer en tu voluntad. Tanto por hacer que, a veces, el reloj se vuelve como tu enemigo. Cómo vas a revitalizar esos años muertos. Urgente despiértenme, la cabeza me explota.